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En la costa sur de España el cangrejo violinista esta en peligro, y no por su pesca masiva sino porque de un tiempo a esta parte los machos han perdido su gancho. Su pinza mayor, que representa el 40% de la carne del crustaceo, es el aperitivo estrella del momento y, aunque los pescadores saben que al extirparsela el cangrejo no muere, pues se le regenera, amputada carece de arma de seduccion, se convierte en eunuco transitorio: sin pinza ya no liga poruqe se le ha robado el principal atractivo sexual. El cangrejo violinista utiliza su gran pinza para alimentarse y proteger su territorio de otros rivles pera tambien la emplea para su extraña danza de apareamiento. Faltandole, las hembras le ignoran y es cortejado ¡por otros machos! |
